Iba paseando por una ancha calle de mi barrio con mi perro, cuando de lejos vi sentarse en el poyete de un jardin a un hombre jóven de unos 30 años, ni siquiera en un banco de los que habia alli no ocupados.
Según me acercaba mi perro olisqueó el bocadillo que éste se estaba preparando y tiraba hacia el muchacho alli sentado;el hombre con unas vestimentas muy sucias levantó la cabeza y me miró...yo disculpando al perro y tirando de él para otro lado le dije... -es que huele a comida y es un tragón - él se echó a reir y con voz extranjera, supuestamente por mi, de los paises del éste, rió agradablemente y rompiendo un pedazo de la mortadela de su bocadillo, no del pan, sino de lo de adentro, y se la ofreció a mi perro en la mano.
Le agradeci su acción hacia el perro y le pregunté... estás sin trabajo verdad ? hizo un mohin con la cabeza y aunque no me lo pidió, eché mano al bolsillo y le ofrecí dinero...cual fué mi sorpresa al oir lo que me dijo...
- No, no señora de verdad me dedico a la chatarra y voy tirando...
- Anda hombre cógelo aunque sea para comprar más pan...
- Es que a usted se le ve mayor y quizás tambien lo necesite...
- Insistí riendo para que cogiera el euro que es lo que le daba, a la vez que el perro seguia pidiendo más comida.
- Finalmente lo cogió, le dió otro pedacito al perro y dándonos las gracias mutuas y despidiéndonos, asi terminó esta historia real.
*** Mi conclusión y supongo que la de todos los que leias ésto es que la honradez de este pobre hombre, era la honradez de un gran hombre, aunque pobre economicamente.
4 comentarios:
Pues mira, aprendemos de todo el mundo, y a veces de las personas más impensadas, o que menos esperamos.
Tú lo has dicho, amiga, tú lo has dicho... hombres así necesita el mundo... y no salvajes avariciosos... Has tenido suerte, has conocido a un HOMBRE. Bss...
Una gran enseñanza de humanidad, de genorosidad y de honradez. También me encontrado con personas así. Es para nota. Gracias por compartirlo.
Bss
Si.Una gran enseñanza de humanidad.
Al darle a Teso parte de la mortadela y no del pan demostró su grandeza.
Linda moraleja :"No es lo mismo compartir que dar las sobras".
No. No es lo mismo.
La honradez de un gran hombre.Tal cual!!!
Hermoso episodio.
Besos muchos!!
Publicar un comentario